Gasolineras con Carburantes Alternativos
Estaciones de Servicio con Hidrogeno en Irlanda en
Los planes para la introducción de una infraestructura de abastecimiento de hidrógeno en Irlanda se están acelerando, y un grupo que representa a los interesados en utilizar el hidrógeno como fuente de combustible proyecta que habrá 80 estaciones de servicio de hidrógeno para 2030.
Hydrogen Mobility Ireland está formado por representantes industriales y gubernamentales, e incluye, entre otros, a BOC Gases, Bord Gáis Energy, Toyota Ireland, CIÉ Group, Hyundai Ireland y departamentos gubernamentales tanto del norte como del sur de la frontera. El grupo quiere evaluar, y luego impulsar, ideas para introducir el combustible de hidrógeno en los vehículos y el transporte público en Irlanda. El informe inicial del grupo ya se publicó, y uno de sus miembros, confirmó que en un principio se dirigirá a flotas "cautivas", en las que los vehículos puedan repostar en un punto de suministro.
La gran ventaja del hidrógeno, como combustible, es su rapidez y facilidad de uso por parte del conductor. Repostar no lleva más tiempo que un coche convencional de gasolina o gasóleo, y la autonomía útil de un vehículo de pila de combustible es prácticamente la misma que la de un coche normal. Dados los diseños actuales de las baterías y los cargadores, es una ventaja que el hidrógeno probablemente no cederá a los coches eléctricos en un futuro próximo. También está el hecho de que el hidrógeno es el elemento más abundante del universo y se extrae con relativa facilidad del agua. La única emisión de un vehículo alimentado con hidrógeno es el vapor de agua, ya que el hidrógeno se combina en la pila de combustible con el oxígeno, formando agua y generando una corriente eléctrica.
Sin embargo, esa es una visión de color rosa del hidrógeno. Si bien es cierto que en el pasado se han proyectado grandes operaciones de extracción de hidrógeno del agua de mar con energía solar, la mayor parte del hidrógeno comercial disponible actualmente es un subproducto de la extracción de combustibles fósiles. Además, comprimirlo, transportarlo y almacenarlo tiene importantes problemas de consumo energético. Las propias pilas de combustible también sufren algunos de los mismos problemas que las baterías, como el uso de metales de tierras raras, que deben extraerse de forma costosa y complicada.
En Irlanda hay actualmenteestaciones de servicio con hidrógeno a la venta